EL ABORTO: asesinato o interrupción voluntaria
Abordar la problemática de la Salud integral de las Mujeres es una deuda pendiente en nuestro país, en eso podemos estar de acuerdo, pero aceptar con marcada complacencia que el debate sobre la legalización del aborto no se dará este año en el Parlamento.
El dilema de la interrupción voluntaria de un embarazo no depende de la formación católica de un legislador, es mucho más trascendente, depende de la decisión de la mujer que lo padece. La decisión moral, finalmente, será siempre personal, solitaria y en consecuencia muy dolorosa y nada fácil. Por ello resulta imprescindible que nuestros legisladores asuman el compromiso por el que fueron electos y actúen en consecuencia, ya que nuestro estado es laico y el dolor de un aborto en clandestinidad es para cualquier mujer independientemente de su religión.
Un Estado Laico como el nuestro tiene el deber de proteger y garantizar el derecho a la salud de todas las personas y, en ese sentido, no se debe anteponer ninguna confesión religiosa particular sino legislar para toda la población. Entendiendo que los temas de salud pública no pueden quedar relegados a las concepciones filosóficas o religiosas de quienes toman las decisiones.
Ahora bien, la Iglesia católica, prohíbe explícitamente el uso de anticonceptivos con la excepción de la abstinencia periódica, y restringe la educación sexual al ámbito familiar. En la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer celebrada en Beijing en 1995, se mencionó que “la Santa Sede de ninguna manera apoya la anticoncepción o el uso de condones, ni como método de planificación familiar ni en los programas de prevención del HIV/SIDA” esto marca la gran contradicción por parte la Iglesia Católica Oficial que predica misericordia y amor por un lado y por otro atenta claramente contra la salud de las personas, esta postura no hace otra cosa que negar la realidad mundial de miles de mujeres que mueren por abortos clandestinos y la expansión del HIV/SIDA.
Morante afirma que “hay que entender que el aborto de por sí es un asesinato. Ya que “está claramente demostrado que la vida comienza a partir de la concepción del óvulo con el espermatozoide” ante estos dichos resulta necesario aclarar que el origen de la “vida” es uno de los problemas fundamentales de las ciencias naturales y que aún no tiene una sola respuesta. En realidad no existe una definición simple de lo que es Vida. La Vida no existe en abstracto ya que hay organismos vivos.
Si nos referimos a la vida individual, no podría empezar hasta que no exista un sustrato biológico, es decir un cerebro al menos en desarrollo que sea capaz de albergar la actividad mental más básica. Si hablamos de dotación genética la vida individual podría empezar con la fecundación. Si hablamos de potencialidad hablamos de lo probable, depende de cual sea la postura o teoría que prevalezca, pero fundamentalmente de los valores que cada mujer mantenga.
Afirmar que interrumpir un embarazo es un asesinato, es en cierta medida desconocer los enfoques que la propia Iglesia ha tenido y tiene al respecto. Santo Tomás de Aquino por ejemplo, sostenía que el Aborto en las primeras etapas no era homicidio ya que el ingreso del alma al cuerpo ocurría luego de los 40 días después de la concepción en los varones y luego de 80 días en las Mujeres. Por su parte San Agustín decía que “el Aborto no era homicidio ya que no se podía comprobar que haya un alma viva en un cuerpo que no este dotado de sentido”.
Seguramente podemos seguir sumando avances en materia de salud, pero estas políticas tendrán resultado positivo en la medida que se respete la autonomía de las Mujeres. En ese sentido hacemos fuerte hincapié en la Educación sexual para decidir, Anticonceptivos para no abortar y Aborto Legal para no morir, es por ello que insistimos que el debate debe darse en el Congreso de la Nación ya que es necesario legislar en beneficio de la salud de las personas y esto se logra entendiendo, aceptando y respetando los derechos de las Mujeres, aquí no entramos en ningún debate filosófico, médico, jurídico, sociológico y mucho menos religioso, ya que las Mujeres somos Personas plenas y no en potencial y nadie puede poner en cuestionamientos nuestros derechos adquiridos.
Fuente: www.chacodiario.com/noticia.php
Comentario:
La tradición de la Iglesia ha sostenido siempre que la vida humana debe ser protegida y favorecida desde su comienzo, como en las diversas etapas de su desarrollo, no hay razón alguna que pueda darnos el derecho a disponer de la vida de un ser inocente e indefenso en el seno materno. Esta enseñanza de la Iglesia "no ha cambiado y no es cambiable". Sin embargo es interesante abordar este tema desde el contexto actual, donde ya de inicio es sencillo tener información acerca de la sexualidad desde muy temprana edad. Aquí la discusión sobre la legalidad del aborto no causaría tanto revuelo si se atendieran temas como la sexualidad responsable desde un enfoque de inteligencia emocional más que meramente fisiológica o reproductiva. Por supuesto que la interrupción legal del embarazo es un derecho, esta opción busca directamente abolir la clandestinidad que ha costado la vida a tantas mujeres y es muy importante considerar que en muchos casos estas mujeres fueron violentadas o bien el embarazo es de alto riesgo, en estos casos ya no se habla simplemente de educación sexual, sino de una disyuntiva en la vida de la mujer, esta legalización del aborto protege el derecho de las mujeres de decidir y garantiza el derecho a la salud.
Preguntas:
¿Cuál es el pensamiento de la iglesia católica sobre el aborto?
¿Qué tan fácil es tener acceso a información sobre el tema?
¿Qué papel juega la educación sexual en relación a este tema?
Posteado por: Arcos de Leon Yelitza Aimee, Hernandez Villanueva Fredy, Falcon Arciniega Patricia Viridiana, Arzate Rodriguez Katya M., Basurto Chàvez Donaji
2 comentarios:
Sin duda el tema del aborto constituye un dilema social que en nuestros días cobra mayor importancia, sobre todo por el papel social de la mujer en las sociedades contemporáneas y la necesidad de legislar sobre los derechos de salud reproductiva. Creo sin embargo que es necesario cuestionar el papel que los grupos conservadores han tenido en México y en muchos países latinoamericanos, al esgrimir el asunto del aborto "criminalizando" esta decisión de la mujeres en condiciones cada vez de mayor incertidumbre. Habría que contextualizar que la legislación del aborto en ciudades como la de México tuvo una amplia consulta ciudadana y sobre todo el diagnóstico de cuántas mujeres morían al someterse a los abortos clandestinos. Por otra parte creo que es necesario revisar hasta donde la educación sexual está teniendo impacto en la formación de una conciencia de prevención del embarazo a edad temprana. Es necesario llevar a las aulas este tema pero también discutirlo con los hombres pues finalmente el problema de salud reproductiva y educación sexual incluye a ambos.
Definitivamente como sociedad, padres de familia, escuelas e individuos tenemos que detenernos apensar n el contexto que envuelve al aborto, ya que resulta ser un "problema" que atañe a todos (y demas) sectores de la sociedad. Sin embargo siendo positivos tambien es un claro ejemplo de la libertad de decision nata de nuestro pais, pero sobre todo de la capacidad de decision que se inculca a nuestro niños. Pues si bien es cierto que cacecemos de una eficaz educacion sexual; ya sea por dogmas y paradigmas familiares, religiosos, morales; tambien es cierto que pareciera que a mas informacion menor responsanbilidad, menor compromiso y mas desidia por proyectar un futuro. En base a las estadisticas(al menos las difundidas) el mayor numero de abortos se da en mujeres de entre 18-25 años, esto es de preocuparse ya que en esa etapa justamente nos desarrollamos fisicamente, intelectual, economica y moralmente; entonces resulta paradojico los resultados de las encuestas. Ahora plantemonos en el ambito de los dogmas y las creencias, Mexico es un pais rico en costumbres, y tradiciones, pero asi tambien es rico (o pobre) en machismo, y practicas apaticas, somos el pais del "mañana", asi pues decidimos o mejor dicho dejamos que otros decidan por nosotros sin mayor reparo ni desgano. En esta cuestion es cuando me atreveria a cuestionar al respecto de la educacion sexual a temprana edad, si como lo menciona Freud el niño no tiene pudor, se le enseña a tenerlo; entonces arriesguemonos de manera proactiva y eficaz a "educar" mas no a "resolver" conflictos propios de la carencia de decicion y educacion.
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